Lejía con propiedades extraordinarias

Hoy voy me voy a introducir en el curioso mundo de la publicidad televisiva, que retuerce el lenguaje para impresionar a las personas a las que dirigen sus mensajes, utilizando términos confusos o que tienen poco fundamento científico. Un buen ejemplo lo tenemos en los anuncios de lejía y quitamanchas.

La lejía «densa»

En esta caso, nos venden una lejía cuya «fórmula densa no salpica». Cierto es que se añaden a ciertas lejías espesantes para que no salpiquen y puedan estropearnos la ropa que llevamos puesta o incluso la piel. Pero el adjetivo no sería «denso» sino «viscoso».

La densidad de un líquido es la relación entre su masa y su volumen, mientras que la viscosidad es la resistencia de dicho líquido a fluir. Un líquido muy viscoso (por ejemplo, un champú) fluirá con dificultad, con lo que será difícil que salpique, pero nada tiene que ver con la densidad de dicho líquido.

El aceite de oliva, por ejemplo, es menos denso que el agua (por ello, el aceite flota), pero es más viscoso y por lo tanto le cuesta más fluir. Y en el caso de este anuncio, sería mucho más real si dijeran «su fórmula viscosa no salpica».

Lejía con control de acidez

Esta lejía se presenta como «lejía con control de acidez». Teniendo en cuenta que la lejía o hipoclorito de sodio (NaClO) es una sustancia básica, lo normal es que la frase fuera «con control de basicidad» o «con control de pH». Aparte de este detalle, el anuncio trata de vender como una cualidad única que contiene este «añadido», que no deja de ser una disolución reguladora del pH (también conocida como «disolución tampón») como las contenidas en un gran número de productos de limpieza, cosmética, sanitarios, etc. Es como si en al anuncio de un coche dijeran «con 4 ruedas y un volante».

El quitamanchas ¡con oxígeno líquido!

Se trata de un quitamanchas que incluye en su fórmula oxígeno líquido. Poco importa que el oxígeno necesite una temperatura inferior a los 183 ºC bajo cero para pasar de gas a líquido, que a esa temperatura lo único del quitamanchas que estaría líquido sería el oxígeno (el resto estaría congelado) y que tendría que ser vendido en recipientes especiales capaces de soportar y mantener dicha temperatura. Ellos sueltan la perla, y siempre habrá quien piense «guau, con oxígeno líquido» (leer con voz de Homer Simpson).

De los viajes en el tiempo mejor ni hablo.

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